La política de China en el conflicto Rusia-Ucrania se establece en los 12 puntos de la «Posición de China sobre la solución política de la crisis de Ucrania» publicada en febrero de 2023. Como medida provisional, el enfriamiento, la reducción de las tensiones y el alto el fuego constituyen la dirección básica de la política de China.
Entre las opiniones encontradas sobre las razones del estallido del conflicto entre Rusia y Ucrania, China tiene su propia interpretación. Pero China cree que lo primero que debe hacer es un alto el fuego, que es la única manera de evitar una escalada que desemboque en una guerra mayor, especialmente una guerra nuclear. China no apoya la guerra y se niega a apoyar activamente a otros países, lo que conduce a la prolongación del conflicto.
China está haciendo todo lo posible para evitar que el conflicto entre Rusia y Ucrania provoque un mayor caos y agitación en la situación internacional. En este contexto, la elección de bando por parte de China podría conducir a un grave desequilibrio en la estructura internacional y a una intensificación de las rivalidades internacionales. La política de China no es unir a un bando contra el otro, sino que está dispuesta a actuar como mediador.
China está comprometida a mantener sus relaciones con todas las partes interesadas, incluidas Rusia, Ucrania, Estados Unidos y Europa, y sus políticas reflejan su pensamiento coherente de mantener el equilibrio y no caer en los extremos. China no tiene intención de utilizar el conflicto Rusia-Ucrania para atrapar a Estados Unidos, ni ha tomado ninguna medida para exacerbar el conflicto entre Estados Unidos, Europa y Rusia.
Sin embargo, Estados Unidos no está de acuerdo con las políticas de China y, de hecho, el conflicto entre Rusia y Ucrania se ha convertido en un nuevo punto de contradicción en las relaciones chino-estadounidenses.
La razón principal de este resultado es que las ideas y políticas fundamentales de ambas partes son incompatibles. La política estadounidense todavía sigue una típica lógica en blanco y negro que considera que el fracaso de China a la hora de enfrentarse a Rusia significa en realidad un apoyo a Rusia. Estados Unidos exige que China elija un bando. De hecho, la única opción que Washington le da a Beijing es ponerse del lado de Estados Unidos y Europa contra Rusia.
El conflicto entre Rusia y Ucrania tuvo un efecto indirecto en las relaciones chino-estadounidenses. Tanto China como Estados Unidos están utilizando el conflicto como un prisma para ver las futuras relaciones entre China y Estados Unidos. A partir de ahí, imaginan posibles conflictos y métodos de conflicto entre China y Estados Unidos que tendrían un impacto negativo en las relaciones chino-estadounidenses. Sin embargo, en lo fundamental, el desdichado estado de las relaciones entre China y Estados Unidos no comenzó con el conflicto entre Rusia y Ucrania, ni fue su causa principal.
Estados Unidos está insatisfecho con el mayor desarrollo de las relaciones chino-rusas por parte de China, y China tiene buenas razones para continuar. Rusia es el vecino más grande de China y los dos países tienen una historia compleja y una larga frontera de más de 4.300 kilómetros. Las relaciones chino-rusas tienen intereses diversos y significativos para China, y éstos son de largo plazo e inmutables. China no apoya la guerra y está comprometida a respetar la integridad territorial de los estados, pero no pondrá en peligro los intereses nacionales de China. China considera normal y legítima la cooperación con Rusia y también está dispuesta a ampliar la cooperación con Estados Unidos, Europa y Ucrania. De hecho, la continua opresión estratégica de Estados Unidos sobre China ha contribuido objetivamente a la creciente cercanía de las relaciones chino-rusas.
No es realista esperar una cooperación integral entre China y Estados Unidos en la cuestión del conflicto ruso-ucraniano. También es demasiado pronto para discutir la reconstrucción de posguerra sin saber cuándo y de qué forma terminará el conflicto. Sin embargo, todavía hay margen para que China y Estados Unidos cooperen en ciertas áreas específicas. En la situación actual, el foco de la cooperación puede y debe estar en prevenir una guerra nuclear y una guerra mundial. Ambos países pueden lograrlo evitando una escalada del conflicto y buscando un alto el fuego.
Además, estabilizar el suministro mundial de alimentos, garantizar el flujo fluido de las rutas de transporte internacionales, prevenir la proliferación de armas nucleares y responder a los desastres humanitarios deberían ser áreas de cooperación fructífera.
En una serie de artículos, expertos chinos y estadounidenses quieren poner de relieve los errores de juicio que provocan desconfianza en la inestabilidad cada vez mayor de las relaciones bilaterales. Puedes encontrar toda la serie aquí.