La hermana André, que nació como Lucile Randon el 11 de febrero de 1904, ha dedicado la mayor parte de su vida a la adoración, según el comunicado. Antes de convertirse en monja católica, cuidó niños durante la Segunda Guerra Mundial y luego cuidó a huérfanos y ancianos en un hospital durante 28 años.
La hermana André, que vive cerca de la ciudad francesa de Toulon, también es la sobreviviente de covid-19 de mayor edad en el mundo. Según la declaración de Guinness World Records, dio positivo por el virus a principios de 2021, pero se recuperó por completo en tres semanas, justo a tiempo para cumplir 117 años.
En una entrevista con el canal de televisión francés RMC Story el martes, la hermana André parecía tener sentimientos encontrados acerca de convertirse en la nueva persona viva de mayor edad.
«Tengo la sensación de que estaría mejor en el cielo, pero Dios aún no me quiere», dijo, calificando el título como un «triste honor».
Sin embargo, también expresó su alegría por ser «mimada» por su familia.
La hermana André disfruta del chocolate y el vino, y toma una copa todos los días, en su hogar de ancianos, Résidence Catherine Labouré, confirmó CNN el martes.
Cuando cumplió 118 años a principios de este año, la anciana monja recibió una nota de cumpleaños escrita a mano por el presidente francés Emmanuel Macron, el decimoctavo presidente francés de su vida, según un tuit del hogar de ancianos. Desde su nacimiento, 10 Papas diferentes han presidido la Iglesia Católica.
El título de la persona más vieja jamás registrada también pertenece a una mujer francesa. La vida de Jeanne Louise Calment, nacida el 21 de febrero de 1875, abarcó 122 años y 164 días según Guinness World Records.