Las aerolíneas chinas pueden expandir los vuelos a los EE. UU. en una pequeña concesión de Washington a Beijing, que se produce cuando los dos países luchan por estabilizar su tumultuosa relación.
El Departamento de Transporte emitió el miércoles una orden que permite a las aerolíneas chinas aumentar sus vuelos semanales de regreso de ocho a 12, igualando la cantidad de vuelos a China que tienen las aerolíneas estadounidenses.
El departamento le dijo al Financial Times que «seguirá considerando cómo y cuándo cambiar aún más su postura sobre la República Popular China». [People’s Republic of China] Vuelos de aerolíneas de una manera que proporcione un entorno operativo competitivo para las aerolíneas en los Estados Unidos».
Beijing había estado presionando a EE. UU. para que aprobara el cambio, en parte para impulsar el turismo, pero también para alentar una mayor inversión extranjera después de eliminar su política de cero covid a fines del año pasado.
Pero las dos partes se vieron envueltas en una disputa sobre la capacidad de las aerolíneas chinas para volar sobre Rusia, lo que les otorga una ventaja de costos sobre las aerolíneas estadounidenses, a las que Moscú ha prohibido hacerlo.
La decisión marca un ligero deshielo en las relaciones entre los países, que han alcanzado su punto más bajo desde que comenzaron las relaciones en 1979.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el miércoles que el presidente Joe Biden y su homólogo chino, Xi Jinping, acordaron establecer «un piso» en la relación cuando se reunieron en noviembre. Sin embargo, esos esfuerzos fracasaron cuando un presunto globo espía chino sobrevoló Estados Unidos en febrero.
Los dos países también se encuentran en medio de negociaciones sobre posibles visitas a China de funcionarios del gabinete estadounidense. Blinken canceló una visita en febrero debido al globo, pero sus esfuerzos para reactivar el viaje se han visto obstaculizados por las preocupaciones de China de que el FBI publicará los resultados de su investigación sobre el incidente.
Funcionarios estadounidenses han visitado Beijing en los últimos meses para allanar el camino para los viajes de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, y la secretaria de Comercio, Gina Raimondo. Varias personas familiarizadas con la situación dijeron que el ministro de Comercio chino, Wang Wentao, visitará pronto Estados Unidos, pero no está claro si su visita incluirá a Washington.
Las aerolíneas estadounidenses habían hecho campaña en contra de permitir más vuelos para sus rivales chinos. El presidente ejecutivo de American Airlines, Robert Isom, dijo la semana pasada que no podía haber un «campo de juego desigual». Dijo que las aerolíneas estadounidenses deberían poder volar a China sin incurrir en mayores costos de combustible o lidiar con tiempos de vuelo más largos que sus competidores chinos.
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