Los soldados de la etnia chin afirman haber tomado el control de casi toda la comunidad de Thantlang en el estado de Chin, en el oeste de Myanmar, cerca de la India, a pesar de la reciente imposición de la ley marcial por parte de la junta en la región, pero los residentes que han huido de los combates dicen que no pueden regresar a casa en el ante la amenaza de ataques aéreos militares.
La semana pasada, la junta impuso la ley marcial en 37 municipios de todo el país y autorizó a los tribunales militares a imponer cadenas perpetuas y la pena de muerte por una variedad de delitos.
La medida se produjo un día después de que los líderes militares extendieran su estado de emergencia por otros seis meses en el segundo aniversario del golpe de estado del 1 de febrero de 2021 que derrocó al gobierno elegido democráticamente.
El gobierno de unidad nacional en la sombra de Myanmar desestimó el anuncio como un intento de salvar las apariencias y le dijo a RFA Burmese que todas las ciudades donde se ha impuesto la ley marcial están de hecho bajo el control de las fuerzas anti-juntas.
El viernes, el portavoz del Frente Nacional de Chin, Salai Htet Ni, confirmó a RFA que una de esas comunidades, Thantlang en el estado de Chin, está bajo el control de las fuerzas de defensa locales, excepto por un área llamada «Tat Kone», o colinas militares, donde la Junta El 269 Batallón de Infantería Ligera está estacionado.
«Aparte de esta área, las fuerzas de defensa locales han dominado el resto de la región», dijo.
Sin embargo, Salai Htet Ni reconoció que los residentes de Thantlang que huyeron de los combates en la comunidad no están listos para regresar ya que las fuerzas de la junta permanecen en Tat Kone.
«Es posible que los militares envíen sus aviones de combate a ataques aéreos después de que… los civiles regresen a casa, por lo que es muy riesgoso para ellos», dijo.
El portavoz dijo que tan recientemente como el miércoles, una fuerza conjunta de combatientes del Frente Nacional Chin y miembros del grupo paramilitar anti-junta Chin Defense Force de Thantlang allanaron la estación de policía del municipio y confiscaron más de 40 rifles y municiones.
Las llamadas a Thant Zin, el portavoz del estado de Chin y ministro de asuntos sociales de la junta, quedaron sin respuesta el viernes. Pero el jueves, los medios a favor de la junta informaron que un «número abrumador» de fuerzas de las CDF había tendido una emboscada a la estación de policía de Thantlang, lo que resultó en una gran cantidad de heridos entre el personal policial cuando huía de la estación en medio de ataques aéreos apoyados.
El riesgo de ataques aéreos permanece
El municipio de Thantlang fue escenario de intensos combates entre el ejército y las fuerzas contra la junta en septiembre de 2021, lo que provocó la destrucción de varias viviendas y la huida de más de 10.000 residentes de la zona.
Una persona desplazada de Thantlang, que pidió no ser nombrada por razones de seguridad, dijo que actualmente era imposible que los civiles regresaran a casa, a pesar de que la CNF tenía el control casi total de la comunidad.
«Si las fuerzas de defensa locales pueden controlar la ciudad, la junta podría atacar de nuevo en respuesta», dijo. «Para mí, tengo demasiado miedo de quedarme en la ciudad. El pueblo es inhabitable ya que la infraestructura ha sido dañada por los combates, por lo que no hay electricidad ni agua corriente. Reparar las carreteras podría llevar meses”.
El ejército lanzó ataques aéreos contra el cuartel general de la Fuerza de Defensa Chin en Thantlang el 10 y 11 de enero, matando a cinco soldados de la resistencia y dañando una clínica médica y otros edificios.
Otro residente de Thantlang, que también habló bajo condición de anonimato, dijo a RFA que la gente estaba «muy nerviosa» incluso mientras cavaban refugios antiaéreos y se preparaban para posibles ataques aéreos.
«Recientemente lanzaron bombas en dos pueblos», dijo. «No hubo heridos, pero tenemos que huir al bosque cuando regresen los aviones de combate».
«Hemos cavado refugios antiaéreos en caso de que no tengamos tiempo [to run]. Todavía estamos preocupados de que la bomba que lancen pueda golpear el refugio antiaéreo allí mismo. Nuestras vidas ahora están en peligro”.
Las estadísticas de los grupos de derechos humanos de Chin muestran que las fuerzas de la junta han incendiado más de 1.300 casas en Thantlang desde el golpe, incluidas iglesias.
Salai Man Hin Lian, funcionario administrativo de la organización de derechos humanos Chin, dijo a RFA que el uso de ataques aéreos por parte del ejército contra civiles es «una grave violación de los derechos humanos».
«Los militares dependen de la Fuerza Aérea porque no tienen la capacidad de lanzar operaciones terrestres», dijo, y señaló que los bombardeos y otros ataques aéreos han causado «daños masivos» a la infraestructura civil.
Según la Organización de Derechos Humanos de Chin, ha habido más de 100.000 personas desplazadas en el estado de Chin desde el golpe.
Ocho municipios del estado de Chin se encuentran actualmente bajo la ley marcial, incluidos Mindat desde 2021 y Thantlang, Hakha, Kanpetlet, Matupi, Tedim, Tonzang y Falam desde el 2 de febrero.
Traducido por Ye Kaung Myint Maung. Editado por Joshua Lipes y Malcolm Foster.
