A pesar de una preparación complicada que incluyó un mes en un campo de entrenamiento esloveno, un equipo emotivo de Ucrania fue un digno ganador esa noche.
No había jugado un partido competitivo desde noviembre del año pasado, pero estaba decidido a darles a los boxeadores algo por lo que animarse en casa.
«Dos horas de felicidad a las que no nos acostumbramos. Salieron. Lucharon. Perseveraron. Ganaron. ¡Porque son ucranianos!
“Todos estamos luchando por esto, cada uno en su propio frente. Por nuestra bandera azul y amarilla, por nuestro escudo de armas en nuestros corazones, por ‘Ucrania aún no está muerta…’ que no se puede silenciar”, dijo.
«Luchamos, luchamos, aguantamos, ganamos».
Con un aspecto mucho más nítido que sus oponentes, Ucrania fue aclamada por miles de aficionados ucranianos que crearon un ambiente brillante en Hampden Park.
Los goles de Andriy Yarmolenko y Roman Yaremchuk dieron a los visitantes el control del juego, pero hubo algunos momentos de nerviosismo en las etapas finales.
Callum McGregor anotó para Escocia con solo 10 minutos para el final y lanzó un ataque sobre la portería de Ucrania.
Pero Ucrania se atrincheró y defendió resueltamente antes de anotar un tercer gol con el último disparo del partido de Artem Dovbyk.
Fue un gol que provocó el caos en el lado visitante, con aficionados llorando, bailando y cantando mucho después de que los jugadores abandonaran el terreno de juego.
«No tengo emociones. Todas mis emociones permanecen en el campo de fútbol. Esta victoria no fue para mí, no fue para los jugadores, fue para nuestro país», dijo a los periodistas el agotado entrenador en jefe de Ucrania, Oleksandr Petrakov, después del partido.
“Jugamos por los que luchan en las trincheras, los que luchan por su última gota de sangre. Sí, hemos dado un pequeño paso hacia nuestro gran objetivo. Todavía tenemos el partido contra Gales por delante y lo haremos todo. Somos ucranianos extremadamente orgullosos».
Ucrania viaja a Gales el jueves y tiene un cambio rápido para estar listo para la final de los play-offs en Cardiff.
Mitchell McCluskey y Josh Pennington de CNN contribuyeron a este informe.