El presidente ruso Vladimir Putin, que ha librado un sangriento asedio a Ucrania durante casi 20 meses en un intento por apoderarse de grandes extensiones de tierra ucraniana, afirmó el jueves que la guerra no era un conflicto por territorio sino por «principios».
“La crisis de Ucrania no es un conflicto territorial y quiero dejarlo claro. «Rusia es el país más grande del mundo en términos de superficie y no tenemos ningún interés en conquistar territorio adicional», dijo Putin en el Foro Valdai en Sochi.
Decenas de miles de personas han muerto, ciudades y pueblos enteros han sido arrasados y miles de millones de dólares en infraestructura han sido destruidos desde que comenzó la invasión de Ucrania por parte de Putin el 24 de febrero del año pasado. Mientras tanto, el presidente ruso ha intentado anexar cuatro regiones ucranianas en violación del derecho internacional y así ampliar la península de Crimea, ocupada por las fuerzas de Moscú desde 2014.
Pero el jueves Putin afirmó que Rusia no estaba “tratando de establecer un equilibrio geopolítico regional” en Ucrania. En cambio, dijo que se trataba de los “principios que subyacen al nuevo orden internacional”.
El rechazo de estos principios, incluido «un equilibrio en el mundo en el que nadie puede obligar unilateralmente a otros a vivir o comportarse como le plazca a un hegemón», es la causa del conflicto, afirmó Putin, aparentemente refiriéndose a Occidente.
Las elites occidentales “necesitaban un enemigo que justificara la necesidad de acción y expansión militar” y convirtieron a Moscú en un enemigo, afirmó Putin.
Algún contexto: Putin es un firme partidario de lo que llama un «orden mundial multipolar», y promueve estructuras como el grupo de economías emergentes BRICS como contrapeso a las instituciones lideradas por Estados Unidos y Occidente que han condenado enérgicamente a Rusia por su guerra contra Ucrania.
Anteriormente había tratado de justificar su brutal guerra afirmando que el deseo de Ucrania de unirse a la OTAN representaba una gran amenaza para Rusia, que su invasión era una misión para «desnazificar» a Ucrania y que su opinión enfatiza que Ucrania es culturalmente parte de Rusia. lingüística y políticamente. Incluso se ha comparado con el zar ruso Pedro el Grande del siglo XVIII.
Ucrania ha rechazado estos argumentos y ha dicho repetidamente que no cederá ningún territorio a Rusia.